Había una vez una mujer muy feliz que tenía los ojos muy abiertos, las orejas bien sintonizadas, el olfato bien agudo, el gusto muy versátil, y el tacto muy delicado.. Como lo escuchaba todo, lo veía todo, lo olía todo... también lo probaba todo .. probó el realismo que tanto la hostigaba en cualquier formato de sus libres sentidos: el no soñar, y el supuesto despertar... ella que tenía los ojos muy abiertos... Dejó de andarse por las ramas de sus queridos hermanos árboles, pues se creyó aquello que le dijeron sobre ser realistas por su propio bien a pies juntillas.. Y así la mujer muy feliz empezó a fruncir los ojos, escuchar demasiado y sin control, a husmear de forma enfermiza, a saborear la amargura como plato principal, y su tacto empezó a ser muy áspero... sólo valía la cruda realidad, nada de cocinar con el amor del fuego.. todo bien crudo y sobre todo desterrar el optimismo fantasioso que los cuentos son para los niños que aún no han sido escolarizados, realismo, realismo... y amén.. Sus sentidos cambiaron rápido, su rostro ya no destilaba felicidad, pero era tan realista por fin.., que hasta su propio corazón le temía latiéndole en episodios de alta ansiedad, su estómago empezó a acidificarse con tanta crudeza en vez de digerir versátil, su mirada tan fruncida empezó a envejecerla a la velocidad de la luz o de tantas supuestas luces.., la piel entera de su cuerpo era pura aridez.. no reía ni sonreía, imposible perder el control de la realidad... hasta que se miró al espejo... y no se reconoció.., no sabia quien era ese rostro enjuto que la miraba tan duramente desde el espejo, observando entrometidamente su rostro "real" aunque lo que hacia realmente era absorber toda la poca vida, belleza y sueños que algún día pudo llegar a tener... y recordó... recordó que ella no era así, que ella había sido muy feliz, que tenía los ojos muy abiertos, las orejas bien sintonizadas, el olfato bien agudo, el gusto muy versátil, y el tacto muy delicado.. que amaba cocinar la cruda realidad en nutrientes alimentos para su alma y para las almas que la rodeaban, amaba andar por las ramas, soñar bien despierta y contarte este cuento basado en hechos reales... o todos los que hagan falta...
Anna Vijo - ƁƦƲʆƛ & ƇHƛMƛƝƛ-
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